España, en el horno...

No jugó su mejor partido, un poco más espeso que de costumbre en el toque, pero tocó bastante, Iniesta hizo unas cuantas, Navas cuando entró hizo una pequeña revolución, Xavi no estuvo del todo despierto... situaciones claras no generó demasiadas y aún así mereció ganar. Pero perdió!

El mayor mérito de Suiza fue lograr mantener a raya a Villa, que casi no tuvo ninguna jugada cómoda. Casi caga todo el asunto cuando subió con mucha gente a disputar un corner cuando ya iba 1-0 y faltaban 10 minutos o así, suerte que el contragolpe llegó a pies de Torres y se le escapó el control, como todos los que intentó (muy espeso se le ve).

Todo hace suponer que clasificará, pero de todas las combinaciones posibles, perdió el peor partido. Es decir...

El candidato del grupo, si pierde el primer partido, lo peor es hacerlo ante el tercero en jerarquia. Si se pierde ante el segundo, lo catapultas a que gane el grupo, pero con limpiar a los otros dos te aseguras la clasificación. Si se pierde ante el patadura, difícilmente lo capitalizará y se irá a casa con 3 puntos. Pero perder ante el tercero, es pasar a tener 2 enemigos reales y no uno. Todo esto apenas es un juego de probabilidades, que como se ha visto en la primera jornada, se dan vuelta como una media.

Pero este resultado enciende la alarma, porque un empate ante Chile en la última jornada, que era probable en los cálculos previos y lo sigue siendo, podría dejar a España tercero y pa casa. La segunda fecha de este grupo aclarará el panorama, pero huele a última fecha para estar prendidos a la radio...

Lo que tiene todos los números, es que se ha perdido el primer lugar. Y eso quiere decir Brasil.